El tanque de refrigerante en una Ford Escape sirve con un sobreflujo para el refrigerante en el sistema de enfriamiento y se expande y se contrae debido a la fluctuación amplia de la temperatura a la cual se ve sometido durante la operación del motor. Con el tiempo, el tanque, el cual está hecho de plástico, se empieza a resquebrajar y puede tener fugas eventualmente. Si esto ocurre, necesitarás reemplazarlo inmediatamente. Cualquier persona con habilidades de reparación de autos básicas, puede reemplazar un tanque de refrigerante de una Ford Escape en dos horas.

Abre el capó y asegúrate de que el motor esté frío al tocarlo. Ubica el tanque de refrigerante, una botella plástica translúcida montada sobre la salpicadera, con una pequeña manguera que va hacia el sistema de refrigeración. Coloca una cubeta en el piso directamente debajo del tanque.

Comprime el gancho de la manguera en la parte inferior de escape del tanque utilizando las pinzas. Saca el gancho.

Tira de la manguera con la mano y luego apunta el extremo abierto de la manguera hacia la cubeta así el refrigerante cae en ella.

Saca los pernos del tanque utilizando el juego de llave de tubo y una extensión de 12 pulgadas (30 cm).

Levanta el tanque con la mano. Ubica el nuevo tanque en su lugar.

Coloca los pernos del tanque con tu mano y luego ajústalos con el juego de llaves de tubo.

Pasa la manguera sobre el tanque con tu mano y lleva el gancho de la manguera de vuelta a su posición utilizando las pinzas.

Vierte una mezcla 50/50 de refrigerante Ford dorado y agua destilada dentro del tanque hasta que alcance el nivel marcado en el tanque. Enciende el motor y déjalo que alcance la temperatura de operación y luego lleva el refrigerante a la marca de llenado caliente.

Advertencias

Nunca trabajes en un sistema de enfriamento del motor a menos que el motor esté frío al tocarlo. Pueden ocurrir lesiones graves o incluso la muerte ante un escape de corriente presurizada.