La falta de mantenimiento

Hay muchas razones por las que una batería de vehículo puede incendiarse. Debido a que se alimenta del sistema eléctrico, la posibilidad de un incendio es muy grande. Sin embargo, la mayoría de baterías de vehículos son seguras, siempre y cuando se mantengan adecuadamente. Esto incluye hacer su revisión en sí cada 12 meses. Sin embargo, deberías también revisar sus pinzas y las conexiones cada vez que llenas tu tanque de gasolina. Además, deberías mantener un extintor de incendios de vehículos de fácil acceso en caso de un incendio en el compartimiento del motor.

Filtración

Cuando una batería de vehículo es cargada, mientras está siendo conducido, el vapor del electrolitro mezclado con el hidrógeno puede escapar y ventilar fuera de la carcasa de plástico. Debido a esto, la corrosión se puede comenzar a formar en los postes y terminales de la batería. Así se inicia una reacción en cadena de las cosas malas que tienen lugar debajo de su bandeja. La corrosión existente tanto en los postes como en las terminales pueden obstaculizar el flujo regular de electricidad a la batería. Los niveles de electrolitos comenzarán a descender una vez que la solución comience a evaporarse y esto la dejará incapaz de mantener una carga correctamente. Mucha gente dejará la corrosión en los cables y la bandeja de la batería, lo cual es un precursor de incendios en ella. La filtración de la batería del vehículo no sólo es tóxica en su forma propia. También es altamente inflamable y puede llegar a ser un peligro de incendio verdadero.

Batería floja

Una cosa que sin duda se puede atribuir en gran manera a una batería de vehículo al coger llamas éste, es si las baterías sostenidas hacia abajo no están bien ajustadas. Una batería puede cambiar si el soporte no es apretado en las curvas difíciles. El terminal positivo de la batería del vehículo estará expuesto al soporte hacia abajo, el cual es de metal revestido de plástico. Puede hacer cortocircuito a tierra si hay un corte en el metal descubierto.