Las suspensiones de aire (neumático) son uno de los tres tipos básicos de suspensiones, siendo los otros dos suspensiones de resorte e hidráulica. Si bien las suspensiones de aire ofrecen ajuste de la altura del vehículo, los resortes de bolsas de aire que utilizan para suspender el vehículo son de respuesta lenta y dinámicamente inferiores en casi todas las demás maneras.

Manejo

El problema principal de la suspensión de aire estándar es que el usuario debe reducir la presión en la bolsa de aire para que baje el auto e incrementar la presión para elevarlo. Esto tiene como resultado un auto que se maneja como una barcaza cuando se baja y corcovea como un vehículo bronco cuando se sube; exactamente lo opuesto de lo que querrías.

Pesado y complicado

Las suspensiones de aire requieren una red de mangueras de aire, reguladores de unión y válvulas de control para funcionar y un compresor de aire para llenar las bolsas. Si bien es más liviano que una instalación hidráulica equivalente, estas partes pueden sumar más de 100 libras (45,35 kg) en el auto, dependiendo del tamaño del compresor. Lo que es más, cada unión es una oportunidad para tener pérdidas.

Respuesta lenta

El aire es elástico, es decir que tiene masa y no le gusta cambiar de dirección. Las suspensiones de aire no pueden responder a los cambios en las condiciones de la ruta con nada que se acerque a la velocidad de un amortiguador magneto-reológico (MR) equivalente. Un amortiguador MR usa un imán para espesar el fluido metálico dentro de su cuerpo, permitiendo que la computadora del auto cambie la firmeza del viaje a la velocidad de la electricidad.