El distribuidor fue el corazón del sistema de encendido de un automóvil durante casi 100 años. Los automóviles de hoy renuncian al distribuidor. Los requisitos de emisiones de control estimularon el uso de sistemas electrónicos a partir de la década de 1970, pero el encendido de platinos utilizado por el distribuidor de confianza sigue estando a bordo de los vehículos hoy en día. El distribuidor es un estudio en la sencillez y el brillo que a veces muestra.

Eje del distribuidor

El eje se parece a un poste que sostiene el resto del distribuidor en su lugar, pero en realidad es más un eje con una leva unida que gira cientos de veces por segundo cuando el motor está en marcha. La leva abre los platinos a medida que gira.

Puntos

Al igual que un interruptor en la caja eléctrica doméstica, los puntos se abren y cierran para bloquear y permitir alternativamente la corriente eléctrica. Cuando los puntos están cerrados, la corriente pasa libremente a la bobina de encendido. Cuando están abiertos, la corriente a la bobina se interrumpe, provocando que el campo magnético se colapse. Este colapso envía la alta tensión de vuelta al distribuidor y al interior del rotor.

Rotor

El rotor, cargado por el voltaje procedente de la bobina de encendido, gira dentro de la tapa del distribuidor, enviando la carga a través de un pequeño espacio a los cables de alta tensión conectados a la tapa. Esto sucede en secuencia para cada uno de los cables, miles de veces por minuto.

Tapa

La tapa del distribuidor alberga los contactos que conducen la carga eléctrica y la envía al cable apropiado. El número de cables que salen de la tapa es igual al número de cilindros del motor. Cada cable lleva a un enchufe de chispa que enciende el combustible en un cilindro.

Módulo electrónico

El módulo electrónico sustituye los puntos. Realiza la misma función que los puntos, pero de una manera mucho más eficiente y sin el mantenimiento requerido por los puntos mecánicos estándares.