Recientemente, Dodge revivió dos modelos famosos de las décadas del 1960 y 1970. El Dodge Charger y el Dodge Challenger fueron muy populares durante la era de los autos potentes. En el siglo 21, Dodge introdujo estos clásicos a un público nueva.

Historia del Charger

El Charger fue lanzado al mercado en 1966 para ayudar a Dodge a conquistar a una generación de compradores jóvenes. El vehículo no fue popular al principio, pero de a poco logro captar la atención de los consumidores, en gran parte gracias a NASCAR. Un Charger con el famoso motor Hemi gano la mayoría de las carreras de ese año. Fue rediseñado en 1968 y el nuevo estilo se hizo popular en la televisión con el "General Lee" en el programa "Los Duques de Hazzard y en la pantalla grande en "Bullitt" con Steve McQueen.

El Charger moderno

Por 15 años, el Charger se hizo cada vez más pequeño y perdió la mayoría del estilo que lo había hecho popular. El modelo fue discontinuado en 1987 y regresó al catálogo de Dodge en 2006. Esta nueva encarnación del Charger obtuvo críticas de distinto signo. Ya no tenía dos puertas como el original y le faltaba potencia. En los tres años siguientes, se le hicieron cambios al motor y se brindaron más paquetes de opciones para hacerlo más popular.

Historia del Challenger

El Dodge Challenger fue lanzado en 1969 como modelo de 1970. Estaba a la venta con techo descapotable y techo fijo y diferentes opciones de equipamiento. Los opciones de motores iban desde motores de seis cilindros con 145 caballos de potencia hasta el motor Hemi 426 con 425 caballos de potencia. Se lo consideraba como un automóvil pequeño para la época. Aunque fue muy popular al comienzo, a mediados de la década de 1970, su popularidad comenzó a declinar. Los consumidores se alejaron de los vehículos devoradores de gasolina a otros más eficientes. El Challenger desapareció del catalogo de Dodge en 1983 como la sombra de lo que una vez fue.

El Challenger moderno

El Challenger regresó rugiendo a la escena automotriz en el 2008. Este modelo imito el estilo del Challenger de la década de 1970. Ofrecía tres planes de equipamiento y las opciones de motor iban desde un V-6 con 250 caballos de potencia hasta un V-8 con 425 caballos de potencia.

Estilo

Desde el punto de vista estilístico, el Challenger representa con más fidelidad al modelo que una vez fue. Desde el comienzo, los diseñadores planearon la incorporación de estilo del modelo original. Nunca se planeó que el Charger tuviese un aspecto "retro" sino que fue una estrategia de mercadotecnia para atraer consumidores de mediana al revivir un modelo popular de sus días de juventud.

¿Cuál comprar?

Los modelos de rango medio de Charger y Challenger tienen motores V-8 y son similares en precio y en opciones. Ambos modelos tienen el mismo espacio en el interior pero las cuatro puertas del Charger hacen que el acceso al vehículo sea mas fácil. Desde un punto de vista estilístico, el Challenger es sin duda el mejor por respetar el estilo del pasado.