En una válvula de control de marcha mínima puede acumularse carbono, lo que la pone pegajosa. Si esto sucede, no podrá controlar la marcha mínima del automóvil, haciendo que éste no se desplace a altas RPM o, en la mayoría de los casos, que se detenga a bajas RPM. Limpiar esta válvula puede evitarte tener que comprar una pieza nueva, pero sólo algunas pueden ser limpiadas. La válvula de control de marcha mínima debe tener una válvula operada por un resorte helicoidal para que pueda limpiarse.

Ubica en el motor la válvula de control de marcha mínima. Está cerca del tubo de admisión a un lado del motor.

Quita la bujía que está por detrás de la válvula usando un destornillador. No rompas la lengüeta plástica que sostiene el grupo de cables al sensor ya que es lo que evita que lo haga vibrar.

Quita los tornillos o pernos que sostienen la válvula al bloque.

Sostén la válvula apuntando hacia abajo, rocía su extremo puntiagudo con limpiador para carburador y pásale un paño (no permitas que el limpiador para carburador entre en la válvula). Repite el procedimiento hasta que no haya más carbono.

Remplaza la válvula y vuelve a conectar el grupo de cables.

Enciende el auto para asegurarte que la marcha mínima funciona bien, y condúcelo un tiempo para asegurarte de que el motor no se para cuando das vuelta a una esquina o cuando estás por detenerte, especialmente con el aire acondicionado encendido. Si se para, deberás reemplazar la válvula de control de marcha mínima.

Advertencias

No pongas limpiador para carburador en las conexiones eléctricas y trata de poner la menor cantidad posible en el cuerpo de la válvula.