El sistema de manejo defensivo de Smith emplea cinco principios básicos. Cada principio está diseñado para reducir los riesgos en la conducción enseñando a los conductores a anticiparse a situaciones peligrosas. Al conducir a la defensiva, las lesiones relacionadas con el tráfico se reducen, incluso en condiciones climáticas adversas. Una regla importante en la conducción defensiva es anticiparse a los errores de otros conductores, ya sea de juicio y/o por falta de cuidado.

Tener miras altas

"Tener una mira alta en la conducción" es el primer principio del Sistema Smith. Un conductor que "tiene una mira alta" se adelanta y ve más allá que los conductores a su alrededor. Conocer las condiciones del tráfico más adelante mantiene al conductor alerta sobre posibles retrasos. Un conductor que está al tanto de los retrasos o accidentes puede evitar las colisiones por atrás y advertir a los conductores detrás de él que reduzcan la velocidad clavando los frenos.

Obtén un vistazo general

Un conductor que "consigue un vistazo general" es consciente de su entorno en todo momento. Este principio enseña a los conductores a ser conscientes de lo cerca que están siendo seguidos y de si algún conductor cercano está conduciendo erráticamente. El conocimiento de estos factores permite al conductor defensivo anticipar los errores de otros conductores y tener una posición acorde.

Mantén los ojos en movimiento

Este principio del Sistema Smith exige a los conductores defensivos ser más conscientes de las condiciones de manejo y del entorno que de los otros conductores en la carretera. Los conductores que mantienen sus ojos en movimiento tienen en cuenta las condiciones del tráfico, el comportamiento de los conductores y las condiciones del camino.

Déjate una ruta de salida

El cuarto principio del Sistema Smith es "déjate una ruta de salida". Los conductores que se dejan una ruta salida se aseguran de no estar muy pegados a otros conductores al anticipar cuando desaceleran. Los conductores que se dejan una salida también evitan estar rodeados de otros conductores eligiendo los carriles exteriores.

Asegúrate de que te vean

El principio "asegúrate de que te vean" evita posibles accidentes al hacer que otros estén al tanto de su entorno. Las formas de hacer que otros conductores te vean incluyen evitar conducir en el punto ciego de otro conductor y hacer uso de los faros, las luces de señalización y la bocina.