Si dejas instalados los cables de las bujías por más de 30.000 millas (48.000 km) sin reemplazarlos (e incluso a veces si no lo haces), pueden endurecerse y complicarte a la hora de cambiarlos. La calefacción y la refrigeración del motor todos los días pueden hacer que la goma se pegue a las bujías de encendido o a la carcasa del electrodo de distribuidor. Cuando esto sucede, necesitarás saber cómo quitar los cables de las bujías pegados.

Rocía una pequeña cantidad de WD-40 alrededor del borde del cable de la bujía. Asegúrate de poner lubricante sobre y alrededor de la superficie donde el cable de la bujía se une a la tapa de la válvula o la tapa del distribuidor (dependiendo de qué extremo desees quitar).

Agarra el extremo del conector con un par de pinzas, y asegúrate de no agarrar el cable con ellas para no dañarlo.

Gira el cable de la bujía ida y vuelta mientras tiras hacia arriba al mismo tiempo; de esta manera ayudarás para que el lubricante haga su trabajo sobre el extremo de la goma hasta que el cable de la bujía se desprenda.