Si vas a actualizar tu cocina y has estado teniendo problemas para quitar el microondas empotrado viejo, entonces estás de suerte. Aunque quitar un horno microondas empotrado puede parecer una tarea desalentadora, especialmente si nunca has instalado o quitado uno antes, es un proyecto muy simple que consiste en la extracción de unos cuantos tornillos.

Apaga la fuente de alimentación que va a tu microondas. Ve a la caja de fusibles de tu casa y apaga el fusible que conduce a tu cocina.

Ubica la parrilla de tu horno de microondas en la parte frontal y retírala. Puede haber un par de tornillos que sujetan la parte frontal en su lugar, o puede que simplemente tengas que retirarla de su lugar. Si hay tornillos que la sujetan en su lugar, desenrosca los tornillos con un destornillador.

Busca tres tornillos directamente detrás de la rejilla frontal del microondas en la parte de atrás. Estos tornillos fijan tu microondas a su unidad de montaje en la pared trasera.

Retira los tres tornillos que conectan el horno de microondas empotrable a la parte posterior de la pared. En este punto, sólo hay dos tornillos en la parte superior, que conectan el horno de microondas a los gabinetes de arriba. Asegúrate de apoyar el peso del microondas una vez que retiras los tres primeros tornillos, ya que podría caerse.

Saca los dos tornillos superiores restantes que conectan tu microondas empotrable a la parte inferior de los gabinetes de arriba. Recuerda que estos son los últimos tornillos restantes que sujetan el microondas, así que asegúrate de que tienes el peso del microondas apoyado antes de retirar cualquiera de estos tornillos para evitar lesiones o daños.

Retira el microondas de la pared.