Muchos vehículos Mazda al ser conducidos están equipados con sensores de neumáticos que monitorean la presión del aire en los neumáticos. Cuando el ordenador determina que la presión del aire es demasiado baja en cualquiera de los neumáticos, un mensaje de advertencia aparece en la pantalla. Los sensores deben restaurarse tras la presión de los neumáticos que se haya corregido para que el sistema siga controlando la precisión los neumáticos. El proceso para restaurar el sistema es el mismo para la mayoría de los modelos de Mazda.

Estaciona el vehículo en una superficie nivelada en donde tengas acceso al aire comprimido.

Retira las tapas de los vástagos de la válvula en cada una de las cuatro llantas.

Presiona el extremo del medidor de presión de aire en el vástago de la válvula de cada llanta para medir la presión corriente.

Presiona la boquilla de la manguera de aire comprimido en el vástago de la válvula de cada llanta que está por debajo de la presión recomendada. Retira la boquilla después de unos segundos.

Mide la presión en las llantas otra vez. Repite el proceso de añadir aire durante unos pocos segundos a la vez y revisa la presión hasta lograr la adecuada en las cuatro llantas. La presión recomendada está impresa en la pared lateral de cada llanta.

Vuelve a colocar las tapas en los vástagos de la válvula de las cuatro llantas.

Enciende el motor. Maneja el auto a más de 15 mph (24 km/h) por al menos 10 minutos para dar al sistema una oportunidad de monitorear y reajustar en base a las nuevas cantidades de presión.