Los motores de automoción se basan en la combustión de los gases volátiles para crear la energía que mueve la masa del cigüeñal. Este movimiento del cigüeñal se transfiere a las ruedas a través de la transmisión para mover el vehículo. El proceso de creación de la energía y el movimiento del cigüeñal son controlados a través de la compleja interacción de los componentes que se basan en la sincronización precisa para que funcione correctamente. El enlace crítico en este proceso es la cadena de distribución. Una cadena de distribución floja interrumpe este momento.

Deficiente ralentí

Cuando una cadena de distribución se desgasta se estira. El aumento de la longitud de la cadena crea holgura en la conexión entre el eje de levas y el cigüeñal. Esta holgura cambia la temporización de las válvulas de apertura y cierre, causando una reducción en las presiones de los cilindros y una puesta en marcha incompleta de la mezcla de combustible y aire. Esto se traduce en un encendido desigual de los cilindros, lo que se advierte como fallos y una marcha lenta y áspera.

Menor rendimiento

Una cadena de distribución floja causará que las válvulas se abran y se cierren en el momento equivocado. Esto resulta en una mezcla de combustible inadecuada en las cámaras de combustión y menos energía producida por el proceso de combustión. Esto se nota en una pobre respuesta del acelerador y la reducción de la energía en general.

Ruido

Una cadena de distribución floja tiene holgura. Esta holgura permite que la cadena se mueva en los engranajes que la conectan con el eje de levas y el cigüeñal. Una cadena floja severamente puede conectarse con la cubierta de la cadena dentada o saltar a los engranajes. Este movimiento da lugar a un ruido de traqueteo procedente de la parte delantera del motor.

Encendido prematuro

Una cadena de distribución que está muy desgastada puede causar la temporización entre la apertura de las válvulas y el encendido de la mezcla de combustible tan fuera de sincronización que la mezcla se encienda mientras las válvulas están todavía parcialmente abiertas. La explosión de los gases de encendidos crea una presión que se escapa más allá de las válvulas abiertas, dando lugar a un ruido fuerte que puede ser escuchado a través del colector de admisión o el escape.