El Ford Ranger usa una transmisión estándar para entregar el poder del motor a la tracción de las ruedas. Muchos problemas de transmisión en el Ranger pueden deberse a niveles insuficientes o periódicamente bajos del líquido de transmisión. Si estás experimentando problemas con tu Ford Ranger, trata de resolverlos primero antes de enviar tu vehículo a un servicio de reparación costoso.

Enciende el Ford Ranger y deja que el motor se caliente. La aguja en el medidor de temperatura del agua debería estar ubicada entre las marcas superior e inferior en el medidor.

Abre el capó y saca la varilla de transmisión del cuello de relleno en la parte trasera del motor. Ésta es la única varilla detrás del motor. Revisa el nivel de aceite. Debería estar entre la marca superior e inferior en el extremo de la varilla.

Llena la transmisión si es que está baja. Coloca un embudo sobre el cuello de relleno y echa líquido en la transmisión hasta que el nivel del aceite esté entre las marcas superior e inferior en el extremo de la varilla. Limpia con un paño cualquier líquido que haya salpicado (durante el proceso de llenado).

Mueve la transmisión en el cambio. No deberías tener dificultad para tener la transmisión en cualquier cambio, y los cambios en sí mismos no deberían rechinar si el nivel de líquido de transmisión es normal. Si rechinaran, puede que tengas un disco del embrague gastado que necesite ser reemplazado por un mecánico profesional. Verifica si hay un disco de embrague gastado conduciendo el Ranger a velocidades de carretera y presionando el acelerador hasta el fond. Si la transmisión se escapa del cambio, entonces el disco de embrague necesita ser cambiado. Si el disco lo has cambiado recientemente, entonces puede que tengas dañados los sincronizadores, necesitando la ayuda de un especialista en transmisión para que los reemplace.