Los cargadores de baterías se utilizan para mantener la carga eléctrica en una celda de pila secunaria. Cuando la batería se descarga, el electrolito de la batería se combina con el material del electrodo, causando formaciones de cristal. Los cargadores de baterías invierten la reacción química que crean los cristales, rejuveneciendo así la batería. Para que un cargador de batería funcione correctamente, el voltaje del cargador debe ser el mismo que el voltaje de la batería. La aplicación de demasiada tensión en una batería hará que el electrolito se sobrecaliente y que esta se dañe. Con unas pocas modificaciones, un voltaje menor de una batería (por ejemplo, una de 6V) se puede cargar con una fuente de energía más grande (por ejemplo, 12V).

Tijeretea con las pinzas de la batería fuera del cargador, dejando aproximadamente 4 pulgadas (10,16 cm) de cable en la abrazadera de la batería. Marca el cable que anteriormente estuvo en la abrazadera positiva de la batería colocando un trozo de cinta aislante sobre el mismo. Pela los extremos del cable de sujeción de la batería y de los cables del cargador en aproximadamente 1/2 pulgada (1,27 cm) de aislamiento.

Suelda el cable positivo de la batería del cargador a uno de los conductores en la primera resistencia. Cubre la junta soldada con cinta aislante cuando se enfríe la unión. Suelda el plomo libre de la primera resistencia a una de las derivaciones de la resistencia no conectada y al cable de la batería del terminal positivo. Cubre la junta con cinta aislante cuando se enfríe la unión.

Suelda el cable libre en la segunda resistencia con el terminal negativo de la batería y el cable negativo del cargador. Cubre la junta soldada con cinta aislante cuando se enfríe la unión.